Parece que fue ayer cuando comencé a leer una blog novela llamada Juego de alas de unos autores desconocidos llamados Fernando Trujillo y César G. Muñoz. La historia me atrapó hasta el punto de casi obsesionarme. Conseguí leer tres o cuatro capítulos. Luego, apareció una entrada en el blog que me alegró y me entristeció al mismo tiempo. La entrada se llamaba Contacto editorial y venía a decir que los chicos habían conseguido un contrato con una editorial para publicar la obra al completo.
Por aquél entonces yo escribía reseñas para la web Fantasymundo y estuve durante unos meses pendiente de estos dos autores y cuando supe que la novela había salido a la venta, le pedí a los chicos de Fantasymundo que me le consiguieran. Necesitaba saber cómo continuaba la historia de Rick, Raven y compañía. En cuanto llegó el libro, lo devoré en dos o tres días.
Al parecer no les fue demasiado bien con la editorial, pues decidieron continuar sus andanzas publicando en Amazon... y el resto es historia. No sé cuantos libros llevan vendidos de todas sus sagas, pero son una barbaridad. Además, tienen un grupo de lectura en Facebook con 5260 miembros a día de hoy y creciendo.
Han abierto varias sagas con gran éxito: La prisión de Black Rock y La Biblia de los Caídos, aparte de varias novelas en solitario.
Estos chicos van para arriba, imparables, y yo estoy encantado de ser testigo de ello. Juego de Alas cambió su nombre por La guerra de los cielos y hace unos días, por fin, se publicó la cuarta y última entrega.
La leeré, por supuesto, pero no antes de leer las tres primeras entregas antes para recordar. Y, también por mi manía de leer las sagas cuando ya están enteras, del tirón, todo seguido, para disfrutrlas más.
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